EstaciónCero. Tuve ganas de correr para escaparme de tu amor. Pero siempre fuiste mucho más veloz. Solo y triste en el desierto no podía escuchar tu voz. Pero aún sin merecerlo, tu amor me rescató. No dejaste de amarme ni un segundo. Más cuando me equivoqué. No dejaste de amarme ni un segundo. Porque siempre has sido fiel.
Hayque cambiar las cosas; si lo que ves no te gusta, muévete: no eres la estatua de tu ciudad, puedes ir donde quieras y hacer lo que quieras. Cambia todo lo que no te gusta de ti, haz que tú misma seas un paisaje digno de mirar una y otra vez: tenemos la capacidad de cambiarlo todo, si nos los proponemos. Sólo puedes dar loTieneclaro que quiere a su pareja, pero siente que está en el interior de un círculo que cada vez la oprime más, que le deja sin aire. Lo que nuestra protagonista debería hacer en este caso no es dejar a
Esmuy difícil dar lo que no tenemos, y si no nos queremos a nosotros mismos, difícilmente podremos ofrecerle amor a los demás. En este casos, es común creer que estamos amando, pero en realidad estamos dentro de una dinámica de dependencia emocional, donde manipulamos, chantajeamos y exigimos al otro ese amor que noNadiepuede entrar ahí a menos de que tú lo permitas). Cuando creas un espacio entre tú y la otra persona, es menos probable que se crucen o borren los límites personales. Cuando estés listo
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